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Cuando nos enfrentamos a problemas, a menudo hacemos dos cosas: pasar rápidamente a la acción o sentirnos abrumados y quedarnos paralizados. No importa cuál sea el problema, nuestro primer paso para ayudar a alguien es estar con Dios. Nehemías afinó su corazón a través de la oración, la adoración y el ayuno antes de empezar a hacer cambios. Descubre cómo puedes buscar a Dios y luego entrar en la obra de cambio del mundo que Él quiere hacer a través de ti.

Cuando se trata de marcar la diferencia, a menudo nos preguntamos si realmente tenemos lo que hace falta. Aunque Nehemías no tenía muchos medios económicos, utilizó su influencia y su conexión con Dios para servir a su pueblo. Esta semana, reconoceremos la belleza de lo que sucede cuando todos abrimos nuestras manos para construir juntos.

Los sueños aparentemente imposibles y los detractores pueden desviar a cualquiera de los propósitos que Dios tiene para él. Pero Nehemías nos muestra que cuando nuestra fe está puesta en Dios y nos apoyamos firmemente en sus promesas, nada es imposible. Nuestros socios globales tienen grandes sueños, y cuando todos nos unimos, ¡podemos hacerlos realidad!