Un gran impacto cerca de casa
Jenna Brooke Carlson, escritora voluntaria, Huntley | 14 de noviembre de 2024

Porque si callas en este momento, el alivio y la liberación para los judíos surgirán de otro lugar, pero tú y la familia de tu padre perecerán. ¿Y quién sabe si para un momento como este has llegado a tu posición real?
Ester 4:14
En una reunión de padres y maestros, un padre vino a una revolución humorística. "No deja de decir que piensa con la cabeza", dijo la madre. "¿Qué otra forma de pensar hay?"
Admití que yo era la culpable. Es común que los maestros de primaria les digan a sus alumnos que "piensen con la cabeza" para evitar gritar las respuestas en clase. La verdad es que no lo había pensado antes, pero la madre tenía razón. Pensar solo ocurre en el cerebro. Me di cuenta de lo mucho que mis alumnos me observaban y captaban mis palabras y gestos.
Esta no es una responsabilidad que tome a la ligera. Al estar en la escuela seis horas al día, me doy cuenta del gran impacto que tengo en la vida de un estudiante. A menudo necesito recordarlo y considerar qué quiero lograr. Si bien enseñar materias académicas es importante, diría que cultivar el carácter es igual de importante, o incluso más. Nuestro aula se convierte en una parte importante del mundo de un niño, su propia pequeña comunidad. Aprenden a interactuar con los demás, habilidades para toda la vida como la perseverancia y la resolución de problemas, y que sus palabras y acciones impactan a nuestra comunidad.
De joven, quería ser misionera: salir al mundo y tener un gran impacto para Jesús. La vida me llevó a vivir a veinte minutos de donde crecí. Si bien se necesitan misioneros y hacen cosas maravillosas por el Reino, he aprendido que no tengo que irme del otro lado del mundo para tener un gran impacto para Jesús. Puedo hacerlo aquí mismo: en mi ciudad, en mi escuela y en mi aula.
Dios ama a sus hijos, y no solo a los pequeños, sino también a los adultos como tú y yo. Nos ha confiado a quienes nos rodean para animarlos y capacitarlos. Mi área de influencia es mi aula, donde desafío a los pequeños a esforzarse para hacer de su mundo un lugar mejor. Tu área de influencia está justo donde te encuentras. Mira a tu alrededor. Estás rodeado de hijos de Dios, y ellos te necesitan.
Próximos pasos
Haz una lista de personas en tu círculo de influencia. Elige una (o más) y ora, preguntándole a Dios cómo puedes apoyarlas hoy.