No estamos solos
Mark Pulsifer, escritor voluntario, South Barrington | 6 de marzo de 2025

El Señor está cerca de los que tienen el corazón quebrantado
y salva a los de espíritu abatido. Salmo 34:18
Una lesión por aplastamiento ocurre cuando se ejerce una fuerza o presión excesiva sobre una parte del cuerpo. Físicamente, son difíciles de sanar y muy dolorosas. Una lesión por aplastamiento espiritual es aún más dolorosa y difícil de sanar porque nuestro espíritu siente el dolor con mayor intensidad, profundidad y duración que nuestro cuerpo.
Cuando pasé por mi divorcio inesperado hace 15 años, mi alma quedó destrozada durante un par de años. Aun considerando todas las heridas físicas y espirituales que he sufrido, mi divorcio fue el período más doloroso de mi vida. Leía y oraba el Salmo 34 todos los días. Dios fue mi compañero constante y me sostuvo cerca.
Una de las maneras más asombrosas en que Dios me sanó del divorcio fue a través de mi voluntariado en el Centro de Cuidado Willow Creek en South Barrington, convirtiendo mi soledad y dolor en un dulce momento con Él. Me bendijo con amor mientras servía a otros en sus necesidades, dándome una historia, esperanza y alegría para compartir con otros, para animarlos mientras los ayudaba a conseguir comida.
La fantástica noticia es que Jesús vino no solo a rescatarnos para la eternidad, sino también a mostrarnos cómo vivir una vida plena y llena de amor. Vino a darnos vida abundante aquí y ahora, no solo después de que pasemos por el velo de la muerte.
Dios salva y sana a quienes estamos desmoralizados, tanto directamente como a través del servicio a los demás. Y servir a los demás en su necesidad con un espíritu de amor es una de las mejores maneras de decirle "Gracias, te amo" a Dios.
Próximos pasos
- Lea el Salmo 34, deteniéndose a reflexionar sobre las distintas líneas a medida que lee el salmo. La vida suele ser difícil y las lesiones por aplastamiento son comunes. Junto con el Salmo 27, es un salmo útil para familiarizarse.
- Inscríbete para ayudar a empacar semillas en cualquiera de las iglesias de Willow Creek. Incluso si no estás pasando por un momento difícil, serás bendecido por servir a otros, tanto personas como familias, que necesitan desesperadamente semillas para alimentarse e incluso generar ingresos.
- Pídele a Dios que tu camino diario se cruce con el de otra persona que necesite un toque de esperanza o de bondad que puedas compartir.