Sí, tú.
Dan Lovaglia, pastor del campamento, Camp Paradise | 31 de diciembre de 2024

Ahora, ve. Te envío al faraón para que saques de Egipto a mi pueblo, los israelitas. Pero Moisés le dijo a Dios: «¿Quién soy yo para ir al faraón y sacar de Egipto a los israelitas?». Y Dios respondió: «Yo estaré contigo. Y esta será la señal para ti de que soy yo quien te ha enviado: cuando hayas sacado al pueblo de Egipto, adorarás a Dios en este monte».
Éxodo 3:10-12
¿Qué diremos entonces en respuesta a estas cosas? Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros?
Romanos 8:31
Pero no soy un líder fuerte.
Pero la gente pensará que estoy loca.
Pero va a dar miedo.
Pero Tú eres todopoderoso y yo sólo soy yo.
Pero estoy seguro que (esta excusa) te hará cambiar de opinión.
Moisés cuestionó a Dios cinco veces en la zarza ardiente del desierto. Uno pensaría que hablar directamente con el Señor le infundiría la confianza para emprender su misión, pero no fue así. Dudaba que él fuera el indicado para el trabajo. ¿Sacar a una nación de Egipto? ¡Eso era demasiado! Ante las excusas e incredulidad de Moisés, Dios seguía diciendo: «Sí, tú». Es más, el Señor le aseguró a Moisés que estaría con él y para él en todo el camino.
En 2020, me pregunté si Dios realmente quería que me convirtiera en pastor del remoto Campamento Paraíso de Willow Creek. Hice una lista de razones por las que tal vez no sería el mejor para el puesto. Pastorear es una cosa, ¡pero vivir en el bosque durante meses! Es demasiado. Pero el Señor y las personas en las que confío dijeron lo contrario. Este verano será mi quinta temporada al frente del Campamento de Papá. Aunque creo que voy por buen camino, el 2025 comienza mañana y todavía me identifico con la incertidumbre de Moisés en el desierto. Por suerte, Dios me recuerda constantemente que siempre está conmigo y para mí.
Mañana comienzas un nuevo año. ¿Hay algo que Dios te esté invitando, instruyendo o inspirando a hacer en respuesta a su dirección? ¿Tienes una tarea abrumadora en el trabajo o la escuela? ¿Te postulas para un ascenso, pero no estás seguro de poder con él? ¿Las fiestas han puesto a prueba tu matrimonio o tu crianza, y temes no tener lo necesario para retomar el rumbo? ¿Hay alguna causa que quieras apoyar o servir, pero dudas en dar el primer paso? ¿Quizás estás cuestionando tu fe y necesitas más confianza de la que tienes hoy para acercarte a Dios?
Si tu corazón está abierto a ello, creo que hay algo que Dios te pide este año. Sea grande o pequeño, ninguna excusa lo hará desaparecer. Cuando acudas a Él y le preguntes: "¿Yo? ¿Estás seguro? ¡Es demasiado!", confía en Dios cuando te diga: "Sí, tú". Él promete estar contigo y para ti de principio a fin.
Próximos pasos
Escuchar a Dios y confiar en que Él está contigo y para ti requiere paciencia y práctica. Dedica 10 minutos a escribir lo que el Señor podría pedirte en 2025. Habla con alguien que te apoye para que, en oración, consideres las excusas que podrían frenarte.