Sorprendentemente con los pies en la tierra
Dan Lovaglia, pastor del campamento, Camp Paradise | 1 de noviembre de 2023

Así dice el Señor:
«Que no se jacte el sabio de su sabiduría
, ni el fuerte de su fuerza
, ni el rico de sus riquezas.
Pero el que se jacte, que se jacte de esto:
de entenderme, de conocerme,
que yo soy el Señor, que hago misericordia,
juicio y justicia en la tierra,
porque estas cosas me complazco»,
declara el Señor.
Jeremías 9:23-24
A la gente le gusta ser sabia, fuerte y rica. Es una búsqueda común y noble cuando la vida gira en torno a uno mismo, lejos de Dios. Pero, para quienes buscan y conocen al Señor, la sabiduría, la fuerza y las riquezas deben quedar en segundo plano. No porque ser sabio, fuerte y rico sea malo, sino porque el Señor es sorprendentemente sencillo.
En el contexto de la Escritura de hoy, al pueblo del Señor le costaba concentrarse en Él a medida que la sombra del Reino de Babilonia se cernía sobre ellos. No fue tarea fácil; la comisión del profeta Jeremías fue presentarles la verdad a pesar de sus circunstancias.
En lugar de centrarse en los rasgos típicos, el pueblo de Dios fue llamado a apoyarse, inspirarse y defender la compasión del Señor en acción. Jeremías 9:23-24 establece un marcado contraste entre la distancia y el egoísmo del rey Nabucodonosor como dictador y la cercanía, bondad, justicia y rectitud del Señor en el mundo.
Es muy difícil confiar en que la bondad de Dios perdure cuando el bien queda sepultado bajo los escombros. Pero eso es lo que revelan las Escrituras y la historia. El amor del Señor es omnipresente, aunque la gente experimente a diario una tierra manchada por el pecado. Mientras que la gente recurre a la sabiduría, la fuerza y las riquezas, es mejor buscar a Dios y vivir la piedad para un bien mayor.
En lugar de permanecer en la grandeza, Dios elige participar en la vida cotidiana, tanto la tuya como la mía. Al igual que en los días de Jeremías, podemos conocer al Señor y sus caminos personal, íntima y eternamente, porque él es sorprendentemente sencillo.
Aquí hay algunas preguntas que le ayudarán a conocer, celebrar y seguir más a Dios hoy:
- ¿Cuándo te ha sorprendido la compasión del Señor en acción hacia ti o hacia otra persona?
- ¿En qué áreas de tu vida o de nuestro mundo se necesita más la bondad, la justicia y la rectitud del Señor en este momento?
- ¿Cómo podemos recordar y mostrar a la gente que el Señor es sorprendentemente realista cuando suceden cosas difíciles?
Próximos pasos
Usa las preguntas anteriores para iniciar una conversación sobre el carácter de Dios con un amigo o un grupo pequeño. Exploren juntos la profundidad y la amplitud de su bondad mientras lo conocen y viven más según sus caminos.