Nuestro objetivo es ser una comunidad eclesial que dialoga sobre las dificultades de la vida. La salud mental es una conversación crucial que queremos abordar para mostrar a las personas la verdad del amor de Dios en tiempos difíciles, la comunidad de la iglesia local donde pueden experimentar conexión y la verdad de que no están solos, y los recursos para recibir la atención adecuada a su situación particular en lo que respecta al bienestar mental.