El orgullo viene antes de la caída
Mary Olsen, escritora voluntaria, South Barrington | 24 de octubre de 2024

La arrogancia del hombre será humillada
y su orgullo humillado;
el Señor será exaltado en ese día.
Dejen de confiar en simples humanos,
que solo tienen un aliento en sus narices.
¿Por qué tenerlos en alta estima?
Isaías 2:17,22
Cuando mis hijos estaban en edad preescolar, teníamos un reproductor de VHS. Para quienes no lo sepan, se insertaba una cinta de casete de unos 10 x 20 cm en una ranura para ver una película en el televisor. El nuestro dejó de funcionar de repente. Fui a la tienda de electrónica con tres niños en edad preescolar y les describí el problema. Mientras miraba a mis hijos, el señor detrás del mostrador dijo: «Parece que metieron un juguete en la ranura».
Respondí con una confianza audaz en mi capacidad como madre: «Mis hijos lo saben mejor. Jamás harían eso».
Probablemente ya te imaginaste el chiste. Cuando fui a recoger el reproductor de VHS reparado, vi una pieza de Lego pegada en la parte superior. Me dio mucha vergüenza, ya que me vinieron a la mente muchos clichés, como "Nunca digas nunca". Pero también me vino a la mente un principio de Proverbios: "El orgullo precede a la caída".
Hay una delgada línea entre avanzar con confianza para cumplir planes y ser arrogante. Me resulta fácil ver a otros cruzar esa línea y caer en el egoísmo cuando hablan con jactancia o tratan a los demás como inferiores. Debo esforzarme más para discernir cuándo cruzo esta línea. Recordar la majestad todopoderosa de Dios y que soy su creación me ayuda a mantener los pies en la tierra.
Al elegir a nuestros líderes gubernamentales, puede ser difícil discernir quiénes buscan su propio beneficio y quiénes están decididos a trabajar para el pueblo. Todos queremos líderes que prioricen las necesidades de quienes gobiernan, pero es una tarea difícil para cualquier ser humano, ya que todos luchamos con el orgullo, y el poder solo lo acrecienta. Por eso, buscamos en Dios la regla suprema. A la hora de votar, sin duda podemos evaluar el carácter de nuestros funcionarios electos por las palabras que usan hacia los demás y su historial de desempeño, pero al final, nuestra confianza está en Dios y no en nuestro voto.
Próximos pasos
Sigamos orando por sabiduría para todos los líderes gubernamentales electos. Y también por sabiduría para nuestro propio comportamiento.